jueves, diciembre 5

Y bien queridos compañeros, se celebró, como ya sabéis, el 37º encuentro el pasado viernes ¿y qué decir? En primer lugar lamentar la ausencia de nuestro amigo Terly que aquejado de una fuerte bronconeumonía está convaleciente pero por fortuna va mejorando, lo sentimos querido amigo y te enviamos un fuerte abrazo con el deseo de tu recuperación total en breve plazo.

Se propuso versar sobre la violencia de género dado que en estos días se ha evidenciado en los medios y las Redes sociales la repulsa total al mal trato físico y moral, todos leímos poemas al respecto con el deseo de aportar nuestro desprecio al maltratador y hermanarnos con los seres que lo sufren, sean mujeres, ancianos o niños, porque desgraciadamente no solo las mujeres son apaleadas, humilladas y escarnecidas.

Concurrimos en esta ocasión:

Joan Casafont, Conchita De Pedrojuan, Hydee, J.María Campillo, Begoña Fernández, Xary Cano, Elena del Valle, Maru, Anna Benítez y por supuesto, yo mismo.

Se leyeron sobre treinta poemas, entre los cuales, la mayoría con el tema anunciado y no dio el tiempo para más ya que se abrieron dos debates en relación al mismo y la religión, como se entenderá, uno y otro daban para mucho más del tiempo disponible.

Entre los declamados editaremos los que nos han remitido hasta ahora:

De Anna Benítez:

 NO QUIERE.
.
Cansado de ser él regresa a casa,
sin ganas de luchar ni por sí mismo.
Las copas no le ayudan...el tiempo pasa
y no consigue salir del negro abismo.

Ella lo aguarda con la mesa puesta.
Los niños ríen felices mientras juegan.
Cenan y los pequeños se acuestan,
la mira y envidia su fortaleza.

Sentados en el sofá, ella intenta darle aliento
pero eso es el detonante y él grita ¿tú qué sabrás?
¡No tienes preocupaciones! ¡Sólo me aportas tormento
y bocas que alimentar!
No eres nada, en cambio yo, me cargo con todo el peso.

Ella le dice, no grites, los niños están durmiendo
y los vas a despertar.

Hasta aquí podíamos llegar
crees que en mi propia casa
¿me puedes mandar callar?
Éi grita y ella se acerca,
para abrazarlo, sin más...

Se desata la tormenta...
Ello cree que es su torpeza
la que. la hizo estallar.

Iracundo la golpea,
y envidiando su grandeza
se convierte en animal.

Pasa el devastador horror
que se ha llevado consigo
la confianza, el honor
el respeto y su marido.

Entre lágrimas y sangre
queda tirada en el suelo.
Arrepentido y cobarde
intenta darle consuelo.

Pero ya no hay vuelta atrás
se ha sentido vencedor
y le volverá a pegar
cuando se sienta inferior.
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De Aydee Nlda:

En nombre del amor

Estoy entre espinas de un desierto
a veces  me cubre la nieve, 
a veces el sol me quema
las espinas y la nieve me confunden,
crecen, caen y se hacen espuma
en pesadillas de noche y día.

Camino,
corro sin rumbo,
las sombras me amenazan
como un ejército embrujado.

Graznan los búhos
y desde la sombra me atacan,
voy tras la única luz
que veo en la distancia.

La calle vomita su desprecio,
maúllan los gatos,
grita una bocina multiplicada.

Es él,
veo sus ojos de fuego
y los cuchillos de nieve me detienen,
suplico de rodillas
en nombre del amor que un día me tuvo,
pido, ruego por una gota de vida
entre un mar de lágrimas.
Solo bebo su desprecio
y el acero de sus manos.

Tarde aprendí
que el amor es un cuento de niños
al que se canta en las baladas,
un sueño en tela de araña,
un sueño sin regreso.
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De Xary Cano "Darilea"

TE GRITO 
Te grito en un suburbio de impotencia, te abandono. Te desgarro a bocados, si pudiera… ¡¡ Ay si pudiera…!! Mas no, te aferras puta y mal criada dolencia, hacer presencia en quién me dio la vida. Te odio, te declaro la guerra y mil puñales lluevan sobre ti, y tus pertenencias. Como dueles maldita, maldita seas. ¿Qué aquelarre firmaste a satanás, que por donde pasas, siembras inmundicia y desastre? Te siento, te presiento sobrevolando la presa. Te odio, te grito, te vomito palabras mientras escribo entre llanto deshecha. _______________

Mi aportación:

HORROR EN EL LECHO

Hay en el aire lamentos
que no se escuchan,
que no se oyen
cegados siempre los oídos
a la palabra que gime, 
y en el desierto clama.

Llanto, terror en los ojos
cuando la mano armada
descarga el cuero
sobre la piel desnuda.

Y sangra como le sangra el alma
al nuevo golpe
porque no pide perdón
al envilecido macho,
amo y señor de su cuerpo
y sus entrañas.

Hay violación en la noche
cuando despierta la fiera
y sin amor, arremete y se ensaña
para saciar su hombría
mientras le grita
¡Ten puta, folla y calla!
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Si alguien más desea editarlo me lo puede remitir por e-mail o dejarlo en comentarios, Por último, inserto un par de fotografías tomadas en una de las mejores horas de la noche, la cena-tapeo donde la poesía queda en segundo plano y da paso a la conversación más distendida entre un grupo de buenos amigos.

El próximo encuentro ya será el 31 de enero estrenando el año. Qué os sea venturoso y se cumplan vuestras mayores ilusiones, un gran y fraternal abrazo a todos.
           Carlos



¡¡Qué aproveche poetas!!


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Feliz Navidad, amigos.